martes, 28 de agosto de 2012
Otro gran misterio de civilizaciones antiguas.
viernes, 17 de agosto de 2012
Sintiendo para vivir mi verdad...
En un principio el ser humano se preguntaba por las mismas cosas que aun lo hace, el tiempo pasa y las preguntas persisten, el ego humano crece desenfrenadamente, tratando de responder ciertas cosas que no logra entender por la avaricia de sus hallazgos, la ciencia y la espiritualidad siempre han estado distanciadas por las creencias erradas que la historia enseña en los colegios y universidades, pareciere que los que entienden la congruencia de estos dos factores se aíslan en su mundo mágico sin importarles sus semejantes, dejando atrás un mundo lleno de sufrimiento, que espera a ser contagiado por la plenitud del pensamiento divino, que emerge en los corazones aislados de naturaleza cósmica, donde el ego y las mascaras que nos impone la sociedad desaparecen para abrirle camino a la conciencia colectiva, el dualismo desaparece y todo vibra bajo las mismas frecuencias del amor que lo ha creado todo.
Todos los cuestionamientos que la mente en su naturaleza se realiza, son inspirados por nuestros ancestros, de donde vinimos? Para que estamos aquí? Porqué la existencia misma? Todo este existencialismo que debatimos con los que nos rodean, los abuelos sabios se dieron cuenta que solo en el interior estaban las respuestas, simplemente escuchando en el silencio íntimo de la soledad, el universo revela sus divinidades y mas que respondernos las preguntas nos hace vivir la magia de la existencia, que es mas importante que cualquier conocimiento, es la sabiduría que percibimos a través de nuestro espíritu, esa que por medio de las experiencias nos enseña los mas importante que venimos hacer a este mundo… AMARNOS!
Resonando en armonía el universo nos reconoce y premia a los valientes que se han aventurado por su siquis, enfrentando todos los miedos con los que nacemos y los que nos influye la cultura, para abrir un nuevo sentir en el corazón, solo debemos dejarnos llevar por las sensaciones, sentimientos y la bondad que tanto necesita nuestra realidad como especie, para que despertemos todos en un solo latir, no debemos enfrascarnos en las preguntas ni las respuestas, solo dejar fluir el rio y aprender a disfrutar del golpe de sus piedras, todo en su mismo caos trae belleza, la serenidad que causa las angustias cuando han pasado son muy valiosas, aprendamos a reconocernos en las situaciones cotidianas y en las pruebas fuertes que nos pone este presente, para que vallamos atenuando esos karmas colectivos y personales que nos han agobiado durante décadas.
Escrito por Sebastian Campo
viernes, 10 de agosto de 2012
América, la Revelación. El Origen del Ser Humano
¿Cómo cambiaría nuestra Conciencia si descubrimos las pruebas de que una Civilización anterior a la Edad de Piedra poseía la tecnología, no sólo para transportar y cortar rocas gigantes, sino también para transportarse a cualquier parte del Planeta?
¿Cómo cambiaría nuestra Conciencia si descubrimos que ese Conocimiento no era sólo tecnológico, sino también filosófico y espiritual, y cuyos contenidos se están revelando hoy en todo el Continente Americano?
¿Cómo cambiaría nuestra Conciencia si al acercarnos a este Conocimiento, descubrimos que existe un Destino y una Misión, y que las preguntas existenciales (quienes somos, y hacia dónde vamos) quedan resueltas?
¿Están preparados? Esto es «América: La Revelación».
América: La Revelación (Avance)
América: La Revelación (Película Completa)
viernes, 3 de agosto de 2012
La Antártida fue un paraíso tropical con palmeras y baobabs
Aunque parezca increíble, la Antártida no ha sido siempre un bloque de hielo. Hace 52 millones de años, el continente disfrutaba de un clima tropical con una vegetación exuberante. En su costa crecían palmeras y árboles relacionados con los baobabs actuales, la misma estampa de lo que habitualmente aceptamos como un paraíso. La investigación, publicada en la revista Nature, puede ayudar a comprender mejor la evolución del clima y los efectos humanos sobre el calentamiento global.
El equipo internacional, dirigido por científicos de la Universidad de Goethe y del Centro de Investigación del Clima y Biodiversidad en Frankfurt, Alemania, analizó muestras de rocas obtenidas de perforaciones en el fondo del mar de Tierra de Wilkes, cerca de la Antártida, una región que es especialmente importante en la investigación del clima.
Las muestras tienen entre 53 y 46 millones de años y contiene fósiles de polen y esporas que se originaron en la región antártica costera. Los investigadores fueron capaces de reconstruir la vegetación de la zona y descubrieron que la costa parecía una fotografía del destino más deseado de una agencia de viajes.
En un área donde la capa de hielo de la Antártida limita con el Océano Antártico en la actualidad, florecían plantas sensibles a las heladas y que aman el calor, como palmeras y los ancestros de los árboles baobab. En invierno, las temperaturas superaban los 10 grados centígrados, a pesar de los tres meses de noche polar.
El interior del continente, sin embargo, era notablemente más fresco. Crecían las selvas templadas con hayas y araucarias del tipo que hoy en día se ven en Nueva Zelanda. La evidencia de las temperaturas extremadamente suaves fue proporcionada por el análisis de compuestos orgánicos producidos por las bacterias que pueblan los suelos a lo largo de la costa antártica.
Corrientes oceánicas y CO2
En esa época, la concentración del dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera era más del doble que la actual. «Si las emisiones de CO2 actuales continúan sin cesar debido a la quema de combustibles fósiles, es probable que volviéramos a obtener esas concentraciones en unos pocos cientos de años», explica el profesor Jörg Pross, paleoclimatólogo en la Universidad Goethe.
Sin embargo, «el contenido de CO2 de la atmósfera no es suficiente por sí solo para explicar las condiciones casi tropicales en la Antártida», afirma Pross. «Otro factor importante fue la transferencia de calor a través de las corrientes oceánicas cálidas que llegaron a la Antártida». Cuando la corriente oceánica cálida se derrumbó y la costa antártica estuvo bajo la influencia de las corrientes oceánicas frías, las selvas tropicales y las palmeras, desaparecieron.
Los modelos computacionales indican que el calentamiento climático en el futuro será especialmente pronunciado en regiones de alta latitud, es decir, cerca de los polos. El conocimiento de episodios pasados de calor global puede ser útil para comprender mejor la relación entre el cambio climático, las variaciones de dióxido de carbono atmosférico y la reacción de la biosfera de la Tierra.
Fuente: http://www.abc.es/20120801/ciencia/abci-antartida-paraiso-tropical-palmeras-201208011816.html
Suscribirse a:
Entradas (Atom)